El 27 de junio, con motivo de la celebración del Día del Orgullo LGTBI, el alcalde socialista de Villanueva de Algaidas, un pueblito malagueño de 4.200 vecinos, desplegó una bandera multicolor en el balcón del Ayuntamiento. Inmediatamente tres vecinos junto a un concejal conservador del PP lo denunciaron ante la Guardia Civil y exigieron la retirada de la bandera, cosa que hizo el Ayuntamiento. Al día siguiente, más de 400 banderas multicolores aparecieron en los balcones del pueblo. Burla burlando…
Hace apenas un mes se hacía el gracioso en el Canal 6 de Nicaragua: “Este virus es maricón, como los ‘puchitos’ (opositores), mirá cómo es de maricón que lo mata la espuma del jabón”. Así se burlaba del coronavirus el veterano cronista deportivo Pepe Ruiz. El 23 de junio falleció. El Covid-19 se burló de él.
La factura del agua en EEUU ha aumentado un 80% en una década y millones de personas no pueden pagarla. A Trump que se burla de los migrantes, de los negros, de las mujeres, del coronavirus, del cambio climático, de los Organismos internacionales… no le preocupa la escasez del agua pues no es problema para los ricos. También Juan Comodoro buscando agua encontró petróleo…pero se murió de sed.
La pandemia floreció en eufemismos: La distancia de seguridad pasó a llamarse “distancia social”. Nuestra permanencia en casa se denominó “confinamiento”. Un virus se convirtió en “un enemigo al que hacer la guerra”. Siguiendo la burla, bajo el nombre de “nueva normalidad” se encierra un estado de anormalidad y de subnormalidad.
El partido conservador del PP considera burla y desprecio a la Constitución española cualquier añadido de los parlamentarios a la fórmula de toma de posesión. Pero el PP no considera burla su incumplimiento de la Constitución al no querer pactar la renovación del CONSEJO GENERAL DEL PODER JUDICIAL como ordena su art. 122. El presidente del CGPJ lleva año y medio en funciones y está nombrando, para mayor burla, a 46 altos cargos judiciales entre sus afines, condicionando la justicia para los próximos 20 años.
“Hay gente pa tó”, dijo el torero Rafael el Gallo. Hay listos morenos de playa que se burlan de los rayos ultravioletas, pero no saben explicar por qué aumentan los cánceres de piel. Hay listos presumidos que se burlan del cambio climático: porque ellos combaten las olas de calor añadiendo cubitos de hielo a sus cócteles y ante las sequías beben vino o cerveza porque ‘el agua es para las ranas’… No se enteran de que la Naturaleza ni se burla, ni olvida, ni perdona.
Hay políticos ultraconservadores, envueltos en la bandera nacional, que acusan al Gobierno de antipatriota y de incumplir la sacra Constitución española. Sin embargo no consideran burla despreciar la esencia misma de la Constitución que en su art. 1 dice: ‘España se constituye en un Estado social y democrático de Derecho’ , y aceptan sin inmutarse la existencia de 12 millones de ‘excluídos sociales y sin derechos’. Antes se les llamaba educadamente ‘los marginados’, en Colombia les llaman directamente ‘los desechables’.
Algunos vecinos se burlaban de Diógenes el Cínico y una vez respondió: “Probablemente los asnos se rían de ti, pero no te importa. Así, a mí no me importa que los demás se rían de mi.”
La ventana del mochuelo
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