También Lucie Josephine Lipschutz Gabriel, escritora y poetisa francesa, se asomó al pasado con este bello poema. Alguien al leerlo se vio reflejado en el espejo.
Quien más, quien menos, se asoma a su propio pasado, a sus años jóvenes y vigorosos, en busca de un relato personal y siempre con cierta curiosidad: ¿Qué quedó de aquellos pasos, de aquellas ilusiones y vivencias…?
Las huellas borradas
Caminante de las brumas,
que llegas de madrugada
al caserío dormido,
por ver si la fuente guarda
la incierta mirada de un rostro,
que en sus aguas se miraba;
las fuentes no guardan nada.
Pasajero de caminos,
que en el agua aletargada,
te integras entre pinares
a ver si los pinos traen
entre sus ramas el eco
de alguna voz, tal vez soñada;
el viento se lo ha llevado…
Peregrino del recuerdo,
que por la senda escarchada,
hollando niebla y rocío,
caminas, oras y cantas
y sueñas que reconoces
las huellas de unas pisadas;
las huellas ya están borradas.
Lucía Lipschutz
(Imagen: Lienzo de Dani Tabasco)
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